Algunas frutas pasas como las uvas, las ciruelas, los higos o los albaricoques también nos pueden echar una mano con nuestra ración diaria de fibras. Aunque tengamos la costumbre de comerlas recién salidas del paquete también podemos utilizarlas para preparar una carne rellena. Otra forma alternativa de consumirlas es rehidratándolas previemante durante un par de horas en una taza de té.