Los 10 errores que tus galletas jamás te perdonarían

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Abrir la puerta del horno

Has seguido cada paso de la receta con precisión y minuciosidad, pero una vez que la bandeja esté en el horno, debes dejar que el calor haga su magia. Aunque quizá parezca inofensivo o incluso beneficioso abrir la puerta del horno para vigilar las galletas, lo que en realidad sucede es que el calor se escapa y esto altera el proceso de horneado. Ya que has trabajado tan duro en las galletas, ¡no lo arruines al final! Mejor usa la luz del horno para echarle un vistazo al proceso si lo necesitas, y abre la puerta solo cuando las galletas estén listas.