La sopa de almejas de Nueva Inglaterra es un plato clásico y contundente que lleva el sabor de la costa a tu mesa. Repleta de almejas tiernas, bacon crujiente y patatas en trozos, esta cremosa sopa de pescado ultra fácil de preparar se cuece a fuego lento hasta alcanzar la perfección con una mezcla de hierbas aromáticas y lácteos frescos. Sírvela caliente con galletas saladas para disfrutar de una comida reconfortante y deliciosa en los días lluviosos de verano.
Ingredientes (para 4 raciones):
4 tazas de almejas troceadas (frescas o en conserva)
1 taza de jugo de almejas (de almejas o embotellado)
4 lonchas de bacon, cortadas en dados
2 cdas de mantequilla sin sal
1 cebolla mediana, picada fina
2 dientes de ajo, picados
2 tallos de apio, finamente picados
3 tazas de patatas cortadas en dados
1 cdta de tomillo seco
2 hojas de laurel
3 tazas de leche entera
1 taza de nata espesa
Sal y pimienta negra al gusto
2 cdas de perejil fresco picado
Galletas saladas, para servir
Preparación:
En una olla grande cocina el tocino cortado en dados a fuego medio hasta que esté crujiente. Retirar el tocino con una espumadera y reservar, dejando la grasa en la olla.
Añadir la mantequilla sin sal a la olla con la grasa del beicon. Una vez derretida, añadir la cebolla, el ajo y el apio picados. Rehogar hasta que las verduras estén blandas, unos 5 minutos.
Añade a la olla las patatas cortadas en dados, el tomillo seco y las hojas de laurel. Vierte el jugo de almejas y agua suficiente para cubrir las patatas. Llevar a ebullición, bajar el fuego y cocer a fuego lento hasta que las patatas estén tiernas, unos 10-15 minutos.
Añade las almejas troceadas, la leche entera y la nata espesa. Cocina a fuego lento durante unos 5-10 minutos. Procura que la sopa no hierva, ya que los lácteos podrían cuajarse.
Sazona la sopa con sal y pimienta negra al gusto. Retira las hojas de laurel antes de servir. Añade el beicon y el perejil fresco picado.
Sirve la sopa de almejas en cuencos con galletas saladas por un lado. ¡Que aproveche!