Utilizamos cookies para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias y hábitos de navegación.
Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.
Más informaciónOK
El pastel azteca no es otra cosa que una interesante versión de la lasaña, ya que se compone de capas de tortilla de maíz con un relleno de pollo, salsa, nata y queso. Es fácil de hacer ya que las tortillas no necesitan de ninguna cocción previa, y está lista en poco tiempo.
Ingredientes para 4 personas:
500 g de pechuga de pollo cocida y desmenuzada
20 tortillas de maíz
2 tazas de salsa verde o roja al gusto (también funciona con puré de tomate)
1 taza de nata agria
1 taza de queso rallado
1/2 cebolla picada
1 diente de ajo picado
Aceite para freír
1 taza de caldo de pollo
Sal y pimienta al gusto
Preparación:
En una sartén grande, calienta el aceite vegetal a fuego medio. Añade la cebolla picada y el ajo, y sofríe hasta que estén dorados. Agrega el pollo ya cocido y desmenuzado, sazona con sal y pimienta, y cocina durante unos minutos para que tome sabor.
Añade la salsa de tu elección al pollo y mezcla bien. Cocina a fuego medio durante unos 5 minutos, añadiendo el caldo de pollo poco a poco para ajustar la consistencia de la salsa.
En una sartén aparte, calienta un poco de aceite y fríe ligeramente las tortillas de maíz, sólo lo suficiente para que se ablanden y no se rompan al montar el pastel. Escurre en papel absorbente.
Precalienta el horno a 180°C. En un molde para hornear, coloca una capa de tortillas fritas en el fondo. Cubre con una capa de la mezcla de pollo y salsa, luego una capa de nata agria y una capa de queso rallado.
Repite el proceso, colocando otra capa de tortillas, pollo con salsa, crema y queso. Continúa hasta que se terminen los ingredientes, asegurándote de que la última capa sea de queso rallado.
Hornea el pastel en el horno precalentado durante unos 20-25 minutos, o hasta que el queso esté bien derretido y dorado en la parte superior.