El strudel no tiene por qué ser solo de manzana, y es buenísimo en versión salada. Para Navidad, prepara una deliciosa variante con patatas y champiñones.
Ingredientes para 6 personas:
Para la Masa:
2 tazas de harina de trigo
1 huevo
1/2 taza de agua tibia
2 cdas de aceite de oliva
1 pizca de sal
Para el Relleno:
4-5 patatas medianas, peladas y cortadas en cubos pequeños
250 g de champiñones, limpios y cortados en láminas
1 cebolla, picada
2 dientes de ajo, picados
1 taza de espinacas frescas, picadas
1/2 taza de queso rallado (opcional)
2 cdas de aceite de oliva
sal y pimienta al gusto
1 cdta de tomillo seco
1 huevo batido para glasear
Preparación:
Para la Masa:
En un tazón grande, mezcla la harina con el huevo, el agua tibia, el aceite de oliva y la sal.
Amasa la mezcla hasta obtener una masa suave y elástica.
Deja reposar la masa en un tazón cubierto con un paño durante al menos 30 minutos.
Para el Relleno:
Hierve las patatas en agua con sal hasta que estén tiernas. Luego, escúrrelas y machácalas.
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva y saltea la cebolla y el ajo hasta que estén dorados. Agrega los champiñones y cocina hasta que estén dorados. Luego, añade las espinacas y cocina hasta que se marchiten, unos 8 minutos.
Incorpora las patatas machacadas al relleno. Condimenta con sal, pimienta y tomillo. Si lo deseas, añade queso rallado. Mezcla bien y deja que el relleno se enfríe.
Precalienta el horno a 180°C. Estira la masa sobre un paño limpio y enharinado hasta obtener una capa fina. Extiende el relleno sobre la masa dejando bordes libres. Enrolla la masa con cuidado, sellando los extremos. Puedes usar un trapo para ayudarte.
Coloca el strudel en una bandeja para horno forrada con papel pergamino. Haz pequeñas incisiones en la parte superior y pincela con huevo batido para un brillo dorado. Hornea durante aproximadamente 30-40 minutos o hasta que esté dorado y crujiente. Deja enfriar antes de cortar en porciones.