El sabor ligeramente dulce de la calabaza se une al aroma marítimo de las gambas. Una receta obligada para todos los fans incondicionales de la pasta que quieran probar algo nuevo.
Ingredientes:
350 g de farfalle
1 calabaza de Hokkaido
1 cebolla
1 diente de ajo
100 ml de vino blanco
8 langostinos
cilantro fresco
30 g de piñones tostados
50 g de parmesano
sal y pimienta
Preparación:
Ahueca la calabaza y córtala en cubos pequeños. Cortar la cebolla y el ajo en dados pequeños.
Calentar 3 cucharadas de aceite de oliva en una olla y añadir la calabaza, la cebolla y el ajo.
Saltear durante 5 minutos. A continuación, se añade el vino blanco y se cuece a fuego lento durante 15 minutos.
Freír las gambas en una sartén con un poco de aceite de oliva. Mientras tanto, cocina la pasta al dente y escúrrala.
Añadir la pasta a la salsa de calabaza. Mezclar todo bien. Incorporar las gambas. Vuelve a mezclar.
Rebanar el cilantro y añadirlo a la pasta. A continuación, espolvorear los piñones tostados por encima.