Esta especialidad se conoce en toda España, pero en Andalucía, es parte indispensable de las fiestas navideñas.
Ingredientes para 10 personas:
70 ml de aceite de oliva
1 trozo de piel de limón
1 cucharadita de anís
250 g de harina
70 ml de vino blanco
1 pizca de anís en polvo
Aceite de oliva para freír los pestiños
Azúcar para espolvorear
Preparación:
En primer lugar, calentar el aceite en una sartén con la ralladura de limón. Cuando la ralladura esté dorada y el aceite muy caliente, retirar la ralladura y añadir el anís. Dejar enfriar el aceite a temperatura ambiente.
Poner la harina en un bol grande y mezclarla con el aceite enfriado y el vino blanco. Añadir una pizca de anís. Amasar bien hasta obtener una masa fina que se despegue de las paredes del bol y dejar reposar la masa durante media hora tapada con un paño.
Extender la masa finamente con un rodillo. A continuación, córtela en tiras de unos 4 cm de ancho y luego en cuadrados. Dar forma de pestiño clásico a cada cuadrado doblando los extremos hacia dentro y pegándolos con una gota de agua. Dejar reposar 30 minutos antes de freír.
Calentar una sartén con abundante aceite y freír los pestiños por tandas, dándoles la vuelta para que se doren por igual. Cuando estén bien cocidos, escurrir los pestiños sobre papel de cocina y mojarlos en una mezcla de miel y unas cucharadas de agua calentada brevemente al fuego o, si se prefiere, espolvorearlos con azúcar.