La sopa de tortilla no es lo que piensas (no, no tiene patata ni huevo). Estamos hablando de las tortillas mexicanas de maíz, la base de los tacos que tanto nos gustan. Por suerte, para esos días fríos existe otra receta tradicional ultra reconfortante y económica. Una vez que la pruebes, comprenderás por qué es una de las sopas más queridas en México. Y no te preocupes por los ingredientes: lo cierto es que ahora es muy fácil encontrarlos en tiendas mexicanas o latinas.
Ingredientes para 4 personas:
6 tortillas de maíz, cortadas en tiras delgadas
2 cdas de aceite vegetal
1 cebolla mediana
2 dientes de ajo
400 g de tomates maduros
1 litro de caldo de pollo
1 cdta de sal
2 chiles guajillo seco
2 chiles chipotles en conserva
Sal y pimienta al gusto
1 aguacate, en rodajas
2 tazas de queso panela, manchego o mozzarella
Cilantro fresco picado, para decorar
Nata espesa, para servir
2 limas cortadas en gajos, para servir
Preparación:
Precalienta el horno a 200°C. Coloca las tiras de tortilla en una bandeja para horno, rocía con aceite y hornea hasta que estén crujientes y doradas, unos 10 minutos aproximadamente. Reserva para usar como topping.
Corta en trozos la cebolla, el ajo y el chile guajillo. Reserva la mitad de un chile para cortar en rodajas pequeñas y decorar el plato al final.
En una olla grande, calienta el aceite a fuego medio. Agrega la cebolla, el ajo y el chile guajillo. Cocina hasta que las verduras estén tiernas.
Agrega los tomates troceados, el caldo de pollo y la sal. Lleva la mezcla a ebullición y luego reduce el fuego.
Licua con una batidora de mano para crear una sopa homogénea. Cocina a fuego lento durante unos 15-20 minutos.
Prepara cada tazón con un puñado de tortilla, algunos cubos de queso, un poco de chile guajillo seco y un poco de aguacate.
Vierte el caldo encima y sirve con nata, cilantro y lima para acompañar.