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Callos con garbanzos
En muchas regiones de España se comen los callos, y en Galicia también son muy populares.
La preparación de los callos con garbanzos es un proceso laborioso que puede tardar varias horas. Primero, los callos se limpian y se cuecen en agua con sal para ablandarlos. A continuación, se cortan en tiras y se cocinan junto con un sofrito de cebolla, ajo, tomate y pimentón. También se añaden otros ingredientes como chorizo, morcilla y jamón serrano, que le dan un sabor muy característico.
Por otro lado, los garbanzos se cuecen en agua con sal hasta que estén tiernos. Una vez que ambos ingredientes están listos, se juntan en una olla y se cocinan a fuego lento durante un tiempo para que los sabores se integren.
El resultado es un plato contundente y muy sabroso, con una textura un poco gelatinosa debido a la presencia de los callos. Es un plato perfecto para los días fríos de invierno, ya que es muy reconfortante y nutritivo.