Volvemos a las frías regiones septentrionales con el plato emblemático de los Alpes: las albóndigas. Espectaculares para terminar un día en la nieve, son igual de reconfortantes (¡o quizá más!) para terminar un día en la oficina.
INGREDIENTES para 4 personas:
4 barras de pan duro
150 g de speck
2 tazas de leche
3 huevos
80 g de harina blanca
1 cda de perejil picado
1 litro y 1/4 de caldo de carne
sal al gusto
Preparación:
Cortar las barras de pan en dados y ponerlos en una cacerola.
Añadir el bacon cortado en dados y el perejil picado.
Batir los huevos con la leche y espolvorear sobre la mezcla de pan. Remover y dejar reposar unos 20 minutos.
Mientras tanto, pelar las cebollas, cortarlas en dados y dorarlas en mantequilla.
Añadir las cebollas doradas con la harina a la masa, añadir sal y mezclar bien. Procura que la consistencia de la mezcla no sea ni demasiado dura ni demasiado blanda.
Formar bolitas y cocerlas en agua hirviendo con sal durante 15 minutos. Sírvelas en caldo caliente.