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Una receta sencilla y elegante para llevar a una reunión o para disfrutar en casa.
Ingredientes para unas 50 galletas:
80 g de harina de maíz fina
200 g de harina de espelta blanca
150 g de mantequilla fría
150 g de queso parmesano rallado
2 huevos
sal al gusto
nuez moscada al gusto
Preparación:
Mezclar el queso parmesano rallado, la harina, la nuez moscada rallada y la sal al gusto.
Añadir poco a poco la mantequilla en trozos pequeños y los huevos, remover lentamente para amalgamar la mezcla.
Una vez compactada, dividir la mezcla en dos o tres trozos, haciendo cilindros y dejarlos en la nevera durante 45 minutos, después de envolverlos en film transparente.
Una vez transcurrido este tiempo en la nevera, pasar los cilindros al congelador durante 30 minutos para que se compacten más.
Sácalos del congelador y corta los cilindros pequeños en galletas de 1 cm de grosor. Si es necesario, vuelve a colocar los cilindros pequeños en el congelador para compactarlos.
Colocar las galletas en una bandeja de horno forrada con papel de hornear, espaciándolas, y hornearlas en el horno precalentado a 180°C durante 14 minutos, hasta que los bordes tomen color. ATENCIÓN: dar la vuelta a las galletas a mitad de la cocción.
Después de hornear, déjalas enfriar el tiempo necesario para que queden crujientes.