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© Getty Images / Moment / Nick Bubb

Scottish Shortbread (galletas de mantequilla)

Esta galleta cremosa y ligeramente azucarada procede de Escocia. Su nombre se atribuye a María, Reina de Escocia, a quien le encantaba este dulce de mantequilla. Hoy en día se suele tomar con una taza de té.

Ingredientes para 32 galletas:

• 2 tazas (450 g) de mantequilla salada
  
• 1 taza (170 g) de azúcar moreno claro
• 1/2 cucharadita de extracto de vainilla
  
• 4 1/4 tazas (550 g) de harina
  
• Flor de sal

Instrucciones:

1. Precalentar el horno a 325°F (160°C). Forrar 2 bandejas para hornear con papel pergamino. 
   
2. Añadir la mantequilla y la nata a un bol grande. Con una batidora eléctrica de mano, batir los ingredientes a velocidad alta durante 5 minutos hasta que la mezcla esté ligera y esponjosa.
   
3. Raspa los lados para reunir la preparación en el centro del bol. Reducir la velocidad a baja y añadir el extracto de vainilla. Añadir poco a poco la harina.
   
4. Mezcla hasta que todo esté bien combinado (no mezcles en exceso). A continuación, forma un rectángulo con la masa y cúbrelo con papel film. Dejar enfriar en el frigorífico durante 1 hora.
   
5. Enharina una superficie de trabajo limpia y coloca la masa en el centro. Enrolla la masa hasta obtener una lámina de 0,5 pulgadas de grosor. Añadir más harina si es necesario, para evitar que la masa se pegue.
   
6. Con un cuchillo grande, corta la masa en 32 trozos de 2,5 x 1 pulgadas. Utiliza un tenedor para hacer agujeros en la superficie de cada galleta en líneas uniformes.
   
7. Transfiere con cuidado las galletas a las bandejas de hornear, dejando un espacio de 2,5 cm entre ellas. Hornear durante 20 minutos hasta que las galletas estén doradas por los bordes. Retirar del horno y espolvorear inmediatamente con flor de sal. Dejar enfriar 5 min.
   A disfrutar.