Otro síntoma externo cuando nuestro organismo se sobrecarga por estrés es la aparición de granitos y acné, especialmente en la zona de la frente y el mentón. Si comienzas a notar brotes donde antes no había, puede que sea una reacción a tus preocupaciones. Aunque tienes que trabajar la raíz del problema, puedes disminuir los síntomas lavando tu rostro 2 veces al día con jabón suave y utilizando una crema hidratante especial para tu tipo de piel.