En México se llama botana a todos los platillos para comer entre comidas, o que se sirven como entrante en reuniones. Esta versión con mariscos es simplemente espectacular.
Ingredientes para 6 personas:
Para el ceviche:
200 g de pescado blanco fresco
la pulpa de 1 coco pequeño (aprox 100-150g)
1 cebolla morada
1/4 de manojo de cilantro
el zumo de 4 limones
1 bolsita de plátano deshidratado
1 aguacate
Para el guacamole:
2 aguacates maduros
2 tomates grandes
el zumo de 1 limón
1/4 de manojo de cilantro
1/2 cebolla morada
Para decorar:
1 bolsa de chips de tortilla
1 pepino
1 bolsa de cacahuates japoneses
200 g de gambas cocidas
salsa picante al gusto (puede ser chamoy, salsa valentina o tipo Sriracha)
Preparación:
Para el ceviche, comenzamos por extraer la pulpa de un coco y cortarla en cubos. El coco lo usaremos para servir el platillo.
Cortamos el pescado en cubos, así como la cebolla. Picamos finamente el cilantro y colocamos todo en un tazón.
Sazonamos con sal, pimienta y zumo de limón. Incorporamos el plátano deshidratado, que le dará un toque dulce y crujiente.
Refrigera al menos 30 minutos, y rellena con él el coco al momento de servir. Decora el borde con rodajas de aguacate. Si sobra un poco, lo podrás usar en el guacamole.
Hacemos el guacamole de la siguiente manera: corta en cubos la cebolla y pon en un tazón. Echa el zumo de limón y mezcla. Incorpora el tomate en cubos y la pulpa de aguacate. Tritura el aguacate con un tenedor para que quede suave. Sazona y decora con cilantro finamente picado. Reserva.
Para armar el plato: coloca el ceviche dentro del coco, decora con aguacate y un par de gambas peladas. Pon el coco en una fuente grande. Coloca en un lado el aguacate y junto a él las chips de tortilla.
Por un lado, pon el pepino cortado en rodajas o cubos, las gambas peladas, los cacahuates japoneses, y cubre con salsa picante y zumo de limón al gusto.
Aprende a abrir un coco con la ayuda de un martillo y un destornillador en 3 sencillos pasos. Primero le extraeremos el agua y a continuación lo golpearemos con el martillo trazando una circunferencia. Te recomendamos colocar un trapo entre la encimera y la tabla para amortiguar los golpes.
No tires el agua, además de ser poco calórica y baja en azúcar, es un magnífico rehidratante natural y está buenísima.