El borscht parece tener su origen en Ucrania, pero es una sopa muy popular en Europa del Este y se prepara en menos de 30 minutos. Esta receta familiar no lleva carne (aunque se hace con caldo) y resalta la exquisitez de la remolacha dulce y terrosa.
INGREDIENTES:
500 g de carne con hueso cortada en trozos grandes (por ejemplo, de ternera)
2 zanahorias
2 remolachas crudas
4 patatas
1 cebolla
2 cucharadas (soperas) de extracto de tomate
Aceite
1 puñado de sal gruesa
1 cucharadita de cilantro en polvo
2 cucharaditas de pimienta (o más si lo prefiere)
3 hojas de laurel
3 dientes de ajo
nata espesa para servir
eneldo fresco para servir
PREPARACIÓN:
Llena una olla a presión con agua y sumerge la carne. Cocínalos a fuego alto hasta que oigas el silbido de la sartén, luego baja el fuego y cocina de 30 a 40 minutos.
Mientras tanto, pelar las verduras y reservar un trozo de remolacha correspondiente a 1/4 de la misma. Rallar la zanahoria y el resto de la remolacha. Picar finamente la cebolla. Cortar las patatas en 5 o 6 trozos.
Freír la cebolla en aceite, luego añadir la remolacha y las zanahorias. Tomar un cucharón de caldo de carne y verterlo sobre las verduras. Dejar cocer durante 15 minutos.
Sacar la carne de la sartén, deshuesarla y cortarla en trozos pequeños que puedan caber en una cucharada. Vuelve a poner la carne en la sartén.
Salar el caldo de carne con sal gruesa. Añadir el extracto de tomate a las verduras. Llevar a ebullición el caldo de carne. Añadir las patatas y la hoja de laurel. Cuando hierva, cocer durante 10 minutos.
Añadir las verduras salteadas en el caldo de carne y el condimento (cilantro y clavo). Cocinar hasta que las patatas estén bien (unos 10 minutos).
Por último, 5 minutos antes del final de la cocción, añadir el trozo de remolacha reservado.
Consejo de la abuela: El trozo de remolacha que se reservó para utilizar al final de la cocción es importante porque dará a la sopa su característico color rojo.