Si te gusta este animal que emula a un murciélago es por una razón muy evidente: ¡eres una persona muy curiosa! Quieres conocer cosas nuevas e interesantes. Tu mente está abierta a las cosas sorprendentes de la vida, pero con ello viene también tu mayor desventaja. Sí. Te encanta meter las narices en lo que hacen de los demás.