¿Sabías que la parte del cuerpo que lavas primero revela todo sobre ti?

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¿Qué nos dice el test de la ducha?

Si empiezas por lavarte los genitales...

Eres una persona insegura y tímida. Valoras mucho la amistad, ya que sabes lo difícil que puede ser encontrar almas afines a la tuya. Eres una persona fiel, confiable y sabes guardar secretos. Te cuesta explicar tus sentimientos y necesidades, así como afirmarte, lo cual puede ocasionarte problemas en ambientes donde es indispensable el trabajo en equipo.  Aunque eres una persona creativa, te cuesta trabajo llevar a cabo tus proyectos, ya que tu inseguridad te hace dudar de tus capacidades. Tienes mucho trabajo emocional por hacer, pero no te preocupes, mostrándote más abierto hacia los demás encontrarás a personas motivadas y tenaces que te ayudarán a lograr todos tus proyectos.

Si empiezas por lavarte las axilas...

Eres una persona confiable, comprometida y muy trabajadora. Tu tenacidad motiva a los demás a seguirte, lo cual te convierte en un líder nato. Siempre cumples tus promesas y esperas que los demás sean tan honestos como tú, aunque lamentablemente esto no siempre sucede. Te gusta ayudar y colaborar con los otros, aunque esto pueda ser malinterpretado como vanidad. Eres humilde y aceptas cada nueva experiencia como una oportunidad para aprender.