¿Sabías que la parte del cuerpo que lavas primero revela todo sobre ti?

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¿Qué nos dice el test de la ducha?

Si empiezas por lavarte el pelo...

Eres una persona soñadora y altamente creativa. Romántico empedernido, eres una persona muy sensible a la comunicación no verbal, puedes detectar fácilmente el humor de una persona y tienes habilidad para interpretar las intenciones escondidas de los otros. Apasionado, nada te detendrá para lograr todos los proyectos en los que crees con el corazón, aunque también sabes ser flexible y rectificar el curso para lograr tus metas... eso sí, siempre te mantienes firme en tus valores. Amigable, tienes facilidad para relacionarte con los otros, y un encanto personal que siempre juega a tu favor. 

Si empiezas por lavarte el pecho...

Eres una persona práctica y sincera. No te gusta andar por las ramas, porque lo tuyo es la claridad y la resolución de problemas. Te gusta el orden, los sistemas y los proyectos bien organizados, por eso tienes talento para dirigir equipos y cumplir metas. El otro lado de la moneda es tu impaciencia, ya que pocas veces te detienes para comprender a los demás, ya que para ti todo está muy claro. No escapas a las discusiones pero tampoco eres una persona conflictiva, ya que te gusta trabajar tranquilo y que te dejen hacer.