Utilizamos cookies para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias y hábitos de navegación.
Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.
Más informaciónOK
El pollo frito era uno de los platos favoritos de Theodore Roosevelt. Conocido por su espíritu aventurero, Roosevelt disfrutaba con las comidas reconfortantes clásicas, y un pollo frito dorado y crujiente era la forma perfecta de satisfacer sus antojos. Roosevelt era un hombre de acción y práctico, y este pollo frito clásico y crujiente era una comida sustanciosa y sin complicaciones que encajaba con su enérgica personalidad.
Ingredientes para 4-6 personas:
1 pollo entero, cortado en trozos
2 tazas de suero de leche
2 tazas de harina común
1 cdta de sal
1 cdta de pimienta negra
1 cdta de paprika
½ cdta de pimienta de cayena (opcional)
½ cdta de ajo en polvo
½ cdta de cebolla en polvo
2 tazas de aceite vegetal (para freír)
Preparación:
Marinar el pollo colocando los trozos en un bol con suero de leche. Cúbrelo y refrigéralo durante al menos 2 horas, o toda la noche para que esté más tierno.
En otro bol, mezcla la harina, la sal, la pimienta, la paprika, la cayena, el ajo en polvo y la cebolla en polvo.
Saca el pollo del suero de leche, dejando que escurra el exceso, y reboza cada pieza en la mezcla de harina sazonada. Presiona la capa sobre el pollo para obtener una corteza crujiente.
Calentar el aceite en una sartén grande a 175°C (350°F). Coloca con cuidado el pollo en el aceite caliente, friendo en tandas para evitar que se peguen. Cocina de 8 a 10 minutos por cada lado o hasta que la temperatura interna alcance los 165°F (75°C).
Escurre el pollo frito sobre una rejilla de alambre o toallas de papel para eliminar el exceso de aceite.
Sírvelo caliente con tus guarniciones favoritas, como puré de papas, pan de maíz o verduras.