¿Sabías que los expertos perfumeros acostumbran oler granos de café para "limpiar" el olfato cuando hacen pruebas de perfumes? Esto se debe a que el olor del café es tan dominante que hace que los otros aromas se vayan de nuestra memoria olfativa rápidamente. Puedes aprovechar este trucazo también en tu cocina, incluso de manera ecológica. Colocando un pequeño recipiente con los pozos de tu café de la mañana podrás absorber los malos olores, dejando un delicado aroma a café que es mucho más agradable.