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Cómo lograr una cocción perfecta
Al contrario de lo que se piensa anteriormente, a menudo resulta energéticamente eficiente no precalentar el horno. La cazuela debe hornearse durante unos 20 minutos a 200 °C. Enciende el grill al final si el queso aún no está dorado. Pero presta atención a las peculiaridades del horno, para que la cazuela esté caliente por dentro y la corteza del queso quede ligeramente dorada.