Este pan plano típico argentino gusta en todos lados gracias a una sabrosa fusión de cebolla y queso que lo hace apetitoso e irresistible.
INGREDIENTES:
500 g de masa de pizza (1 rollo de masa para pizza)
200 g de queso provola 100 g de mozzarella
2 cebollas grandes
queso parmesano al gusto
sal y pimienta al gusto
Preparación:
Precalentar el horno a 220°C.
Cortar finamente las cebollas y dorarlas en una sartén con un poco de aceite y una pizca de sal. Tapar y dejar que se ablanden durante unos 4 minutos.
En una bandeja de pizza, extender la masa, presionando con los dedos en la masa para crear pequeñas cavidades. Vierte las cebollas pochadas en la bandeja y hornea durante unos 15 minutos.
Ahora saca la focaccia del horno y córtala por la mitad en profundidad, con cuidado de no romperla.
Reparte los quesos en el interior, dejando algunos a un lado, luego tápala y vierte el resto por encima junto con una pizca de queso parmesano.
Hornear unos minutos y servir la focaccia bien caliente.