Derretir 20 g de mantequilla para engrasar los moldes de las magdalenas y rallar el queso.
Tamizar la harina y la levadura en polvo en un bol, añadir el polvo de nuez y el queso rallado. Mezclar con cuidado y luego añadir el resto de la mantequilla cortada en trozos pequeños.
Amasar la masa con los dedos como si se tratara de la masa de un bizcocho. Hacer un pozo en la harina y romper el huevo en él. Incorporarlo con un tenedor hasta obtener una masa maleable.
Formar 8 bolas, dibujar una cruz en la punta con un cuchillo y deslizar medio grano de nuez en el centro. Ahora coloca las bolas en los moldes untados con mantequilla y hornea durante unos 15 minutos.
Déjalos reposar durante 5 minutos, desmóldalos y sírvelos calientes o tibios.