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8 Maneras en que tus hábitos alimenticios están afectando  el cambio climático

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© Getty Images / E+ / fcafotodigital

Este queso tiene una huella de carbono mayor que la del pollo ...

el queso duro. Malas noticias para los amantes del queso. Los quesos duros, como el cheddar y el parmesano, aportan 14 kg de CO2 por 1 kg producido y 13,5 kg de CO2 por 1 kg producido, respectivamente. El pollo tiene un índice de emisiones menor, de 6,9 kg de CO2 por 1 kg. Parte de la razón por la que algunos quesos tienen un mayor impacto en las emisiones de carbono se debe al hecho de que requieren 10 libras de leche para producir una libra de queso.

Por otro lado, los quesos más blandos y con mayor contenido de humedad se elaboran con menos leche, requieren procesos de maduración más cortos o no los requieren y, por tanto, utilizan menos energía en general. 

¿Qué puedes hacer? Si no puedes imaginar tu vida sin queso, limítate a las variedades más blandas, como el requesón, el feta, el brie, el camembert y el queso de cabra. Intenta reducir tu consumo de queso en general, o sustitúyelo por opciones veganas de vez en cuando. Lo más importante es que no compres más de lo que puedas comer antes de que se estropee: se emite más de media libra de CO2 por cada onza de queso que se queda sin comer.


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