Más allá de la mujer trabajadora
Aunque el 8 de marzo está íntimamente relacionado con cuestiones laborales, no se trata solamente de un paro laboral. Aunque es cierto que en la convocatoria se habla de abandonar las actividades para salir a marchar, no es una invitación únicamente para las mujeres que trabajan en oficinas. Es una invitación para que las mujeres dejemos de hacer también labores de limpieza y cuidados en el hogar.
Las mujeres trabajamos muchas veces a doble turno, entre las responsabilidades profesionales y las tareas domésticas que no se reparten equitativamente. Además tenemos la responsabilidad e la crianza de los hijos, que muchos hombres simplemente no asumen como parte de sus tareas. La participación de las mujeres en nuclear en todas las esferas de la vida, por eso la huelga tiene que alcanzar también otros espacios.
Esta invitación es también para amas de casa, para que ese día dejen de realizar sus labores del hogar, para jóvenes estudiantes, para cuidadoras, profesionistas, mujeres de todas las edades. Se trata de unirnos para demostrarle a la sociedad que nuestro trabajo es muy valioso y pasa desapercibido, que existe una desigualdad económica desde la base del sistema y que no podemos seguirlo tolerando.
Como dice el eslogan de la plataforma: Sin nosotros no se produce, sin nosotras no se reproduce.