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La yuca en 13 recetas para descubrir su sabor y propiedades

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Rebañando

Un ingrediente versátil, sano y barato que proporciona recetas sabrosas, con un sabor acogedor y ¡te dejará queriendo más! Hemos seleccionado recetas baratas para que disfrutes aún más de la yuca, un tubérculo muy apreciado en Latinoamérica.

© Pixabay / KavindaF

¿De dónde viene la yuca o mandioca?

La yuca es un tubérculo originario de Sudamérica que también está muy presente en la cocina africana. A pesar de ser poco consumida en Europa, la yuca es hoy la quinta planta más consumida del mundo, por detrás del arroz, el trigo, el maíz y la patata. En términos de nutrición, este tubérculo sin gluten y muy digerible tiene muchas ventajas que sería una pena perderse.

Características:

  • Buena fuente de energía
  • Regula el tránsito intestinal
  • Naturalmente sin gluten
  • Efecto saciante
  • Buen contenido en vitaminas y minerales

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Técnicas de cocina

Bombas de papa rellenas de jamón y queso, ¡un bocado explosivo!

 

Buenísimas, muy rápidas y sobre todo, muy sabrosas.

 

INGREDIENTES: 

  • 200 gr de patatas.
  • 3 cucharadas de parmesano rallado.
  • 100 gr de harina.
  • Queso en lonchas o en trozos pequeños.
  • Jamón.
  • Aceite.
  • Sal.

 

PREPARACIÓN:

1. Comenzaremos por pelar las patatas y echarlas a hervir, durante 15 minutos aproximadamente (pínchalas con un tenedor para comprobar que están bien hechas).

2. Machácalas hasta hacerlas un puré, que pondremos en un bol grande. Agrega una pizca de sal y el queso rallado. Por último, los 100 gramos de harina. Mezcla todo bien hasta que quede una masa homogénea.

3. Enharina un poco la superficie de trabajo y la masa misma y extiéndela con un rodillo. Sírvete de un corta galletas para hacer círculos en la masa.

4. Sobre la mitad de ellos, coloca una loncha o un trozo del queso que más te guste. Sobre el queso, una lonchita de jamón. Cierra los círculos con las mitades sobrantes (aprieta un poco con los dedos alrededor del borde).

5. En una sartén lo suficientemente grande, pon el aceite a calentar y échalas a freír. Dales la vuelta cuando ya estén doraditas por una cara y sácalas cuando lo estén por las dos.

 

La tentación es grande, ¡pero ten cuidado de no quemarte!

 

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