Tarta mousse de 3 chocolates sin horno, ¡demasiado fácil para ser verdad!

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preparación 2:

Las capas de mousse tenemos que hacerlas una por una. Primero, vamos a derretir la cuajada o grenetina en medio litro de leche que llevaremos al fuego para calentar sin dejar que hierva. Batimos muy bien para diluir y añadimos la nata. 

Esta preparación la separamos en tres partes iguales. Volvemos a llevar la primera parte al fuego y le ponemos el chocolate negro en trozos, batiendo para que se derrita sin pegarse a la olla. Cuando rompa hervor retiramos y vertemos en el molde. Tip de cocina: siempre hay que dejar enfriar un poco antes de llevar al congelador para evitar que se formen bacterias.

Mientras la primera capa se solidifica, vamos a repetir el procedimiento tomando otra parte de la mezcla y derritiendo el chocolate con leche. Una vez más dejamos entibiar y añadimos a la tarta. Volvemos a congelar.

Por último hacemos lo mismo con lo que quedó de la mezcla y el chocolate blanco. Hay que verificar bien que la capa anterior haya cuajado para evitar que los colores se mezclen. Ahora sí, dejaremos nuestra tarta un par de horas más para que tome su consistencia definitiva.