Un buen cochinillo al horno tiene una carne suave que se deshace fácilmente y una corteza crujiente y llena de sabor. Este plato de fiesta puede encontrarse también en restaurantes donde se ofrecen generosas porciones con su característico color dorado y acompañado de patatas. El secreto está en su larga cocción para que quede en su punto, de preferencia a la leña. Si tienes la ocasión de comer un buen cochinillo castellano, no la dejes pasar.
Ingredientes para 6-8 personas:
1 cochinillo limpio y abierto por el medio
1 taza de manteca
2 dientes de ajo
2 ramitas de romero
1 cdta de orégano
1 cdta de tomillo
1 cda de sal gorda
1 vaso de agua
4 hojas de laurel
Preparación:
Calentar la manteca para derretirla, y mezclar con el ajo machacado, el romero, orégano, tomillo y sal gorda.
Colocar el cochinillo panza arriba en una fuente engrasada y cubrir el interior con la mezcla de manteca. Pinchar la piel y untar el resto sobre la superficie.
Verter el agua en la fuente cuidando no mojar la parte superior del cochinillo y distribuir las hojas de laurel.
Hornear a 150°C durante hora y media. Vamos vertiendo el jugo sobre la carne según lo vaya soltando, sin dejar que se seque por completo la bandeja.
Subir la temperatura a 190°C cuando esté casi cocido y seguir durante media hora, para que la piel quede crujiente.
Sacar del horno, trocear y servir con los jugos aparte para que cada comenzal los vaya añadiendo.