50 Platos franceses que conquistaron al mundo
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Soupe à l'oignon
Por alguna razón, la sopa de cebolla suele ser más popular entre los turistas que con los locales, algo completamente injustificado si pensamos en su sabor. La sopa, como su nombre lo indica, lleva abundante cebolla en un caldo que puede ser más o menos espeso y con sabor a mantequilla, que puede ir cubierta con una costra de queso gratinado. Suele servirse con picatostes, y es el entrante perfecto para calentarse en invierno.
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Técnicas de cocina
Pan, patatas, bacon y, por supuesto, mucho queso. ¿Qué es? Una tartiflette en formato fondue, o dicho de otro modo, el paraíso de los muy queseros.
INGREDIENTES:
- 1 pan de campo o pan de pueblo.
- 1 queso reblochon.
- 15 patatas pequeñas.
- 7 u 8 lonchas de bacon.
- 3 dientes de ajo.
- 1 cebolleta.
- Sal gorda.
- Aceite de oliva.
PREPARACIÓN:
1. Abre el pan por la mitad y vacía la base de miga con la ayuda del cuchillo de pan y una cuchara. En el hueco, coloca el queso. Tápalo de nuevo con la parte de arriba, envuélvelo por completo en papel de aluminio e introdúcelo en el horno a 180 ºC durante 30 minutos.
2. Mientras, pon a hervir 15 patatas pequeñas en agua salada.
3. Corta las lonchas de bacon en dos y extiéndelas. Cuando estén hechas, envuelve cada una de las patatas en uno de los trocitos de bacon y ponlas en una bandeja para hornear junto con los dientes de ajo machacados (sin pelar), un chorrito de aceite de oliva y sal. Hornea durante 20 minutos a 180 ºC.
4. Saca el pan del horno, ábrelo y espolvorea la cebolleta picada por encima del queso.
Sírvelo todo junto y moja las patatas en el queso antes de llevártelas a la boca. ¡Mmmh!