¡Vaya si es bonita! Descubre nuestra deliciosa receta de tarta de ruibarbo y disfrútala con tus amigos en un picnic.
Ingredientes:
Para la masa
250 g de harina
1 huevo
125 g de mantequilla fría
60 g de azúcar glas
Para la crema de almendras
100 g de almendras molidas
60 g de azúcar
1 huevo
25 g de mantequilla ablandada
1 sobre de azúcar vainillado
1 pizca de sal
Para la guarnición
10 tallos de ruibarbo
50 g de azúcar
500 ml de agua
Preparación:
En un bol, mezclar la mantequilla cortada en trozos con el azúcar glas. Añadir la harina y mezclar los ingredientes hasta obtener una mezcla desmenuzable. Añadir el huevo y remover. Amasar bien la masa y formar una bola. Colocar la bola en un bol, cubrirla con film transparente y meterla en la nevera durante 30 minutos.
Una vez transcurrido el tiempo de reposo, extender la masa con un rodillo. Colocar la masa extendida en un molde rectangular untado con mantequilla y cortar los bordes que sobresalen del molde.
Para la crema de almendras, mezclar la mantequilla ablandada con el azúcar y el azúcar vainillado. A continuación, añadir las almendras molidas. Añada ahora el huevo y remuévalo.
Extender la crema de almendras sobre la masa y hornear a 180 °C durante 30 minutos.
Lavar los tallos de ruibarbo y cortar los extremos. Con una cortadora de verduras, corta los tallos de ruibarbo en tiras finas.
Llevar el agua a ebullición y añadir el azúcar. Escalfar las tiras de ruibarbo durante dos minutos y secarlas sobre papel de cocina. Repetir el proceso hasta escalfar todas las tiras de ruibarbo. Reservar el almíbar restante.
Para el diseño de damero, coloca seis tiras de ruibarbo escalfadas horizontalmente sobre un trozo de papel de cocina. Ahora levanta alternativamente tres de las seis tiras (la segunda, la cuarta y la sexta). Ahora coloca otra tira de ruibarbo verticalmente encima de las tres tiras que han quedado acostadas. Dobla las tres tiras levantadas hacia abajo. Ahora levanta la primera, la tercera y la quinta tira de ruibarbo, coloque otra tira verticalmente junto a la primera tira vertical y vuelve a doblar las tiras horizontales levantadas. Continúa así con las tiras restantes para formar un tablero de ajedrez. Haz un segundo tablero de ajedrez con las tiras para poder cubrir toda la superficie de la tarta con el ruibarbo.
Recorta los bordes de los tableros de ajedrez de ruibarbo para ajustarlos al tamaño del molde de la tarta. Saca la tarta del horno y déjala enfriar. Cúbrela con tu obra de arte de ruibarbo y úntalo todo con el almíbar restante.
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