La temperatura ideal de tus alimentos antes de cocinar es la temperatura ambiente. Por esto lo recomendable es descongelar por completo los alimentos que vayas a utilizar, ya sea dejándolos desde la noche anterior en el frigorífico o dejándolos en la encimera por la mañana. Si necesitas descongelar más rápido, puedes poner los alimentos en una bolsa de plástico y sumergirlos en un bol con agua a temperatura ambiente. La transferencia de calor para igualar ambas temperaturas hará que se descongelen más rápido.