Poner la leche condensada en un cazo. Romper el chocolate negro en trozos y añadirlo a la leche. Derretir el chocolate a fuego medio, removiendo regularmente. La mezcla resultante será relativamente espesa, lo cual es normal.
Hacer un puré con las avellanas, el azúcar y el agua en una batidora de alta potencia hasta que sea homogéneo. Añadir a la mezcla de chocolate y remover.
Añadir la nata líquida y seguir removiendo hasta conseguir una mezcla homogénea.
Poner la crema para untar en tarros. Se puede guardar en la nevera hasta 3 semanas.