Estás preparando una receta con huevo y terminas con pequeños trozos de cáscara en la encimera. Puede parecer sencillo simplemente juntar los trocitos y echarlos al fregadero. ¡No lo hagas! Incluso los pedacitos de cáscara de huevo pueden adherirse a las paredes internas de la tubería, que con el tiempo van desarrollando una capa pegajosa por la acumulación de residuos y la presencia de hongos y bacterias. Si a esta barrera se añaden otros objetos sólidos, con el tiempo terminará en un atasco difícil de quitar. En el caso del huevo, utilízalo para hacer composta, o simplemente deséchalo con la demás basura orgánica.