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No es necesario
Finalmente, el argumento más contundente quizás sea que sencillamente, no es necesario.
Sí, es cierto que la producción actual no es suficiente para satisfacer la demanda de pulpo, pero los países en los que la demanda ha aumentado no necesitan consumir este animal para garantizar su subsistencia. Su consumo está mucho más ligado al lucro y a los placeres gastronómicos que a la necesidad, y continuar con el modo de producción actual implicaría únicamente que las personas que deseen comerlo deberán pagar un poco más para hacerlo.
Por ello, en definitiva, no es necesario fomentar la crueldad animal ni hacerle más daño al planeta solo para satisfacer los antojos de algunos. ¡Se tenía que decir y se dijo!