7 razones impactantes para dejar de usar pajitas
El colorido accesorio de tus bebidas está terminando con las especies marinas, pero tú puedes detenerlo
¿En verdad son necesarias las pajitas?
Las encontramos prácticamente en todas nuestras bebidas: jugos, refrescos, los frapuccinos que están tan de moda, cócteles e incluso en simples vasos de agua. Aceptémoslo: las pajitas están en todas partes, y están causando muchos más estragos de lo que piensas.
Relacionamos las pajitas con el verano, las bebidas refrescantes al borde de la playa, noches de fiesta, las fotos del café que subimos a Instagram, y mucha diversión. Estamos tan acostumbrados que si nos sirven nuestra bebida sin una, la pedimos de inmediato. Sin embargo, este colorido accesorio es el peor enemigo del océano.
Durante los últimos años han surgido diversas campañas ecologistas para incitar a la gente a dejar de usar pajitas, proponiendo incluso que sean prohibidas en bares y restaurantes. Lamentablemente, el impacto de dichas campañas a sido limitado, y es en gran medida debido a que nosotros los consumidores no hemos tomado conciencia de la magnitud del problema. Es por ello que te presentamos las razones impactantes por las que debes dejar de usar este accesorio.
¿Por qué debemos dejar de usar pajitas?
Porque las cifras son impactantes:
- Mil millones de pajitas son utilizadas al día en todo el mundo
- Tan sólo en los Estados Unidos la cifra asciende a 500 millones diarios
- El tiempo promedio de utilización de una pajita es de solo 20 minutos
- Si hiciéramos una línea con todas las pajitas que desechamos al día, podríamos darle 5 veces la vuelta a nuestro planeta
- Las pajitas se encuentran en el top 10 de basuras encontradas en la playa
- Las pajitas no pueden ser recicladas
- A causa de los desechos plásticos (entre ellos las pajitas), 1.5 millones de animales marinos mueren cada año, y el número va en aumento...
Si estas cifras no son suficientes, existe una gran cantidad de videos en Youtube donde puedes ver animales marinos sufriendo porque tienen trozos de plástico en su organismo. Recordemos simplemente el video que dio la vuelta al mundo, en el cual un grupo de veterinarios extraen una pajita de las narinas de una tortuga, causándole un tremendo dolor. Ya que se trata de un evento impactante y no queremos lastimar su sensibilidad, los invitamos a buscarlo por ustedes mismos.
¿Te parecen razones suficientes?
Lo cierto es que el uso de pajitas es una necesidad inventada en los Estados Unidos durante la década de los 50s, cuando comenzaron a abrir los primeros restaurantes de comida rápida y se volvió más popular entre los jóvenes salir a tomar algo con los amigos. La cultura de consumo hizo que se popularizaran rápidamente en otros países, sin tener en cuenta las consecuencias de este hábito dañino para el planeta.
Algunos podrán argumentar que las pajitas son absolutamente necesarias para niños y pacientes de los hospitales. Aunque en muchos casos es cierto, también lo es que los niños pueden tomar agua en vasos con pajita integrada, de mayor duración y fáciles de limpiar. En el caso de los hospitales, claramente no vamos a juzgar esta necesidad, aunque lo ideal sería que éstos adquirieran pajitas más durables que sean desinfectadas después de cada utilización.
En cuanto a aquellos que utilizan pajitas después de un blanqueamiento o limpieza dental, aunque los dentistas lo recomienden, la única manera real en que el líquido no entrará en contacto con tus dientes sería introduciendo una pajita hasta la garganta (y no creo que a nadie le apetezca hacer eso). Lo cierto es que en esos casos utilizar una pajita no hace una diferencia en tu salud dental, pero sí en el medio ambiente.
¿Qué podemos hacer para disminuir este problema?
Aunque se trata de un problema muy grande, nuestras acciones cotidianas pueden hacer la diferencia:
- Cuando vayas a un restaurante o bar, recuerda siempre pedir tus bebidas sin pajita
- Si en verdad quieres utilizarlas, busca siempre aquellas fabricadas en cartón biodegradable
- Si tienes niños en casa y te parece un accesorio indispensable, puedes invertir un poco más en comprar pajitas de larga duración en bambú, acero inoxidable, cartón, etc.
Puedes conocer más sobre estas campañas visitando la plágina de la ONG Plastic Oceans
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