Además de paz y amor, la Navidad también es fantasía, la época perfecta para volver a sentirse como un niño. Hay gente, sin embargo, que se lo toma demasiado literal y lleva este espíritu a la cocina, donde puede convertirse en un arma de doble filo y dar como resultado algunas espeluznantes creaciones... ¿Preparado?
Comenta este artículo