Croquetitas de Poleá con Piñones y 3 Salsas
La poleá es un postre típico de Andalucía Occidental, más de Huelva, Sevilla y Cádiz, que dicen pertenecen a la familia de las gachas dulces. La poleá es una elaboración MUY humilde que cobró popularidad en la hambruna de los 40 en esta zona del Bajo Guadalquivir y se realizaba especialmente en Navidad y Semana Santa a falta de tener algo "mejor". Con el paso del tiempo la poleá se fue enriqueciendo con leche, canela y aromas cítricos (originalmente se hacía con aceite, harina, agua, azúcar, anís verde, pan frito y... poco más). La elaboración es muy básica, técnicamente me recuerda a una bechamel dulce y se presenta sin muchas pretensiones con curruscos de pan frito.
Aquí es dónde he querido contribuir, entre otras cosas, presentándolas empanadas en lugar de servirlo del modo tradicional, es decir, con el pan frito, además de añadirles piñones y acompañandolas de salsas dulces. (También he hecho una presentación adicional si no se quiere hacer en croquetas).
Con esta receta quiero rendir mi pequeño homenaje todas las madres, abuelas, tías, hermanas, sobrinas, primas... En definitiva al matriarcado, que con muy poco supieron hacer felices y sonreír a sus familias con este postre en fechas señaladas y que, ahora, nos vuelven a hacer disfrutar.
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