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Fíjate en las salsas
Muchos restaurantes ofrecen salsas o dips para picotear mientras pides tu comida. En los restaurantes de gama alta generalmente podrás estar seguro de que los pequeños bocaditos o dips que te sirven han sido preparados el mismo día. Sin embargo, en otros restaurantes, en especial en lugares turísticos o ciudades que no conoces, puede ser un poco más difícil detectar su calidad. Para esto, mira en las mesas el aspecto de las salsas o dips para juzgar su nivel de frescura. Por ejemplo, una salsa a base de tomate fresco debe tener un color intenso, y los cubos de tomate deben lucir firmes. Por su parte, las salsas deben tener un color vibrante, ya que al lucir más "opacas" puede ser señal que se han mezclado con residuos de otras salsas. Mientras más frescas luzcan, mejor. Si tienes la oportunidad (aunque no siempre es posible) puedes olerlas para tener otro indicio de su calidad.