Utilizamos cookies para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias y hábitos de navegación.
Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.
Más informaciónOK
No silbes ni chasquees los dedos para llamar la atención de tu camarero. Recuerda: son humanos, no perros y vendrán una vez que tengan la oportunidad. En vez de eso espera a que terminen de atender a otros clientes antes de hacer un gesto cortés o llamarlos.