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Ollas quemadas y con manchas
Por mucho que las cuidemos, puede pasar que quememos una olla o sartén y se quede esa costra que con solo mirar nos da ganas de llorar o tirar la sartén. Pero no desesperes, ¡tienes aliados para hacer el 90% del trabajo duro!
Toma la sartén quemada y lávala con jabón para eliminar solo el exceso de grasa y comida, especialmente de los bordes, si no están quemados. Pon vinagre en la sartén para cubrir las manchas y déjalo hervir durante 5 minutos. Deja enfriar y lava con una esponja, normalmente las costras se desprenden sin que te esfuerces.
Si la quemadura es realmente aterradora, llama a otro aliado: el bicarbonato de sodio. Realiza el mismo procedimiento anterior, agregando aproximadamente 4 cucharadas de bicarbonato de sodio al vinagre, antes de hervir. Esta cantidad varía según el tamaño de la sartén y la cantidad de vinagre que tuviste que usar para cubrir toda la quemadura. Verás que las placas quemadas salen del fondo de la sartén, si aún así no salen todas a la vez, repite el procedimiento.