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El hábito cuenta
Sin embargo, pese a este condicionamiento genético, las costumbres también juegan un papel importante en el desarrollo del gusto por el cilantro.
Así, una persona que ha crecido comiendo cilantro, desarrolla un precedente y aunque sea portador del gen, puede disfrutar de esta hierba. En cambio, quienes lo prueban por primera vez en la edad adulta no tienen recuerdos asociados a ese sabor y lo relacionan con productos de limpieza, por ejemplo.