Ecuador: viaje culinario al medio de la tierra

DeEfraín Frank Rodríguez, 15/05/2015

297 compartidos Compartir en Facebook Twitear Pin it Share on WhatsApp Compartir

Un país con una gran diversidad cultural y geográfica tiene una inmensa gastronomía. Este es el caso de Ecuador, una nación andina diversa, histórica y sabrosa que se abre paso en el mundo gastronómico.

Desde su formación republicana, Ecuador preservó un gran acervo de entradas, platillos, sopas y guisos. Ceviches, llapingachos, mote pillo tostado, bolones rellenos con camarón, corviche, locros y chicha de yuca conforman el gran menú de su cocina.

¿A qué se debe su gran variedad? Ecuador es un país con una gran diversidad biológica. Los ecosistemas costeros, serranos y selváticos permiten generar especias, animales de carnes apetitosas y especias únicas. Ecuador es uno de los 20 países más diversos del mundo. De ese modo, todos los ingredientes de su heterogeneidad se funden en las ollas y forman su gran gastronomía.

Comer en el medio de la tierra

Si se viaja a Ecuador es obligatorio probar el aguado de gallina: una sopa preparada con pollo, arroz, papas, zanahorias, cebollas, hierbas finas y especias latinas.

El arroz ecuatoriano también es un guiso importante dentro de su ruta gastronómica. El platillo se prepara a base de pollo macerado en un aderezo de cebollas, zanahorias, pimientos, apio, ajo, achiote, cilantro y hierbas finas.

Otro plato bandera es la fritada de chancho. Se toma un trozo de carne y se lo cocina con agua, jugo de naranja, cebolla, chalote, comino y pimienta hasta dorar. Se puede comer con plátano frito, mote, aguacate y ají criollo.

¿Y existen aperitivos? El llapingancho es el bocadillo especial de los ecuatorianos. La preparación es sencilla: se debe soasar una masa suave de papa sancochada. Después de su cocción, se le monta un aderezo frito de cebolla blanca, queso rallado, salsa de maní, chorizo, palta y achiote. Excelente para una cena en medio del planeta.

Lenguaje sabroso

Ecuador no solo conserva una sabrosa gastronomía dentro de la olla. También la ostenta en los nombres de sus platillos. Así existe, por ejemplo, el "Caldo de 31" y la "Sopa manguera".

El primero se prepara con las tripas de la vaca, cebollas, ajo, cilantro y papas. El nombre se debe a su precio. Los cronistas populares de Ecuador señalan que el caldo costaba 31 centavos. El platillo fue bautizado con la cifra de su precio y se hizo popular.

Y en el segundo está ligado a los bomberos de Ecuador. La tradición ecuatoriana relata que los ciudadanos preparaban un caldo a base de salchicha y tripas para celebrar a estos héroes. El consomé era regalado a los bomberos en octubre, en homenaje a sus servicios.

Ecuador se abre paso en el universo de la cocina latinoamericana. Con historia y sabrosura en una buena porción de guiso.