TRANQUILIDAD Y EXCLUSIVIDAD ANTE TODO
Esas son las dos premisas que más valoran lo millonarios del mundo a la hora de hacer las maletas e irse de vacaciones. No te creas que van a coger su jet privado para ir a esa playa perdida que se esconde detrás de tu pueblo. ¡No! Los ricos apuestan por paraísos donde el lujo está al alcance de su mano y nada es demasiado para hacerles disfrutar como autenticos reyes.
Hoteles o resorts superlujosos, islas y playas privadas, y algunos destinos más clásicos pero no menos onerosos forman parte de la lista de lugares donde todo resulta -y es- caro aunque seguro que merece la pena pagarlo.
Recorremos el mundo de la mano de esos humanos que no escatiman en gastos. Ellos pueden permitirse lo que para nosotros está tremendamente prohibido puesto que en nuestros bolsillos no hay espacio para guardar tantos billetes.
Comenta este artículo