Cupcakes de zanahorias con crema de queso ligera

De

Unos cupcakes superesponjosos, sin mantequilla muy ligeros que acompañados de una crema ligera de queso, también sin mantequilla, serán una delicia en tu paladar.

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  • Fácil
  • 20 minutos
  • 25 minutos
  • Económico

Ingredientes

  • Para los cupcakes:
  • 75 gr. azúcar moreno molida
  • 100 gr. azúcar caster (azúcar blanca molida)
  • 100 gr. harina integral
  • 100 gr. harina normal
  • 1 1/2 cdta. levadura química
  • 1 cdta. bicarbonato
  • 1 cdta. canela molida
  • 1/4 cdta. nuez moscada molida
  • 1/4 cdta. clavo molido
  • 1/2 cdta. jengibre
  • Ralladura de la piel de 1 naranja
  • Ralladura de la piel de 1 limón
  • 50 gr. pasas sultanas
  • 3 huevos M
  • 150 ml aceite de girasol
  • 200 gr. zanahoria pelada y rallada
  • Para el frosting de queso:
  • 200 ml. nata para montar (yo usé La Asturiana)
  • 200 gr. queso crema tipo Philadelphia
  • 100 gr. azúcar glas tamizada

Preparación

Paso 1

Preparación:
Preparamos las cápsulas de cupcakes en los moldes y precalentamos el horno a 180ºC, calor arriba y abajo sin ventilador, con la bandeja a media altura.
Poner el aceite y los huevos en un bol grande y batirlos hasta que formen una masa ligera y bien aireada.
En otro bol, poner los azúcares, las harinas, el bicarbonato, la levadura, las especias y las ralladuras y mezclarlas un poco a velocidad baja con el mezclador de varillas.
Añadir poco a poco a la mezcla de sólidos, la mezcla del aceite y los huevos e ir batiendo a velocidad media-baja. Cuando esté todo incorporado, batir a una velocidad un poco más alta para que no queden grumos.
Añadir las zanahorias ralladas y mezclar a velocidad baja hasta que esté todo bien incorporado.
A continuación, añadir las pasas y remover con una cuchara de madera mezclando con cuidado y con movimientos envolventes.
Llenar las cápsulas de cupcakes 2/3 y meter en el horno durante unos 25-30 minutos. Insertar un palillo para comprobar que están hechas, si sale limpio es que lo están.
Dejar unos 5 minutos en el molde y luego poner en la rejilla de enfriamiento hasta que estén completamente frías.
Cuando estén fríos, hacemos el frosting.

Paso 2

Antes de nada, habremos metido en la nevera un cuenco metálico y las varillas para montar la nata.
Montamos la nata.
Ponemos en un bol el queso y el azúcar y mezclamos hasta conseguir una crema suave. No demasiado porque ya sabéis que el queso se licua rápidamente.
Vamos añadiendo la nata al queso poco a poco y lo vamos mezclando con movimientos suaves y envolventes hasta que esté todo bien integrado. Conseguiremos una crema ligeramente untuosa que pondremos sobre el bizcocho o lo utilizaremos para acompañarlo.

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