- 4
- Media
- Medio
Ingredientes
- 2 kg de almejas, 2 dientes de ajo, 2 cebollas, 1 hoja de laurel, 75 ml de aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas de harina de trigo, 2 cucharadas de perejil picado, 2 cucharadas de salsa de tomate casero, 1 cucharada de pimentón, 1/2 guindilla, 1 vaso de vino blanco y sal.
Preparación
Paso 1
Pelamos las cebollas y los ajos. Quitamos el centro del ajo para que no repita ni pique. Troceamos finamente las cebollas, los dientes de ajo y el trocito de guindilla (si nos os gusta ese toque picante ya sabéis, obviad este ingrediente), deben quedar trocitos muy pequeñitos con el fin de que al final del guiso no se aprecie ninguno de los dos ingredientes.
Paso 2
Ponemos la cazuela que hemos empleado para hacer las almejas al vapor con el aceite de oliva y añadimos la cebolla y el ajo. Cuando esté todo bien pochado y con un característico color tostado añadimos el pimentón de la Vera y removemos a fuego lento durante 1 minuto, que no se queme o nos estropeará la salsa.
Paso 3
Espolvoreamos la harina en la cazuela y removemos con cuidado para mezclarla bien. El efecto de la harina con la cebolla y sobre todo el aceite se llama Roux, nos ayudará a ligar y espesar la salsa. Dejamos que se cocine tomando algo de color pero sin que se queme. Perfecto, ya tenemos la base de la salsa marinera.
Añadimos el vaso de vino blanco, en este caso he elegido un Ribeiro. Emplead siempre un buen vino, el mismo que vayáis a beber en la comida, la receta os lo agradecerá. Removemos espesando la salsa y dejando que se evapore el alcohol. Introducimos lo que ha quedado del agua de hacer las almejas al vapor y el tomate frito casero. Dejamos que espese durante unos 10 minutos a fuego medio sin dejar de remover.
Paso 4
Salpimentamos si es necesario aunque normalmente no es necesario añadir sal, la que deja el jugo de las almejas es suficiente. A continuación añadimos las almejas que ya teníamos seleccionadas y abiertas al vapor. Ligamos la salsa y las almejas un par de minutos removiendo con mucho cuidado, esperamos un par de minutos más con el fuego apagado hasta que las almejas se impregnen bien de la salsa. Servir en cazuela de barro preferiblemente.
Si te gusta que tengan un puntillo más picante añade una pizca de pimentón picante además de la media guindilla. Si no podéis cocinar las almejas el mismo día para calentarlas y que la salsa no espese de más hacedlo al baño maría o bien a fuego muy lento hasta que cojan calor. Se puede espesar la salsa con unas rebanadas de pan frito.
También te gustará
-
Lenguado con leche de coco 4.3/5 (12 Votos) -
Pollo con botella 4/5 (225 Votos)
También te gustará
-
Gazpacho de pera 4.1/5 (147 Votos) -
Mejillones con picada 4.3/5 (4 Votos)