Mezcla para incorporar los ingredientes, y cuando la nata esté bien caliente, agrega la pastilla de caldo. Ahora es momento de probar la salsa y ver si necesita más sal o pimienta. Normalmente sí es necesario añadir un poco de pimienta en polvo para darle ese sabor tan característico. Si quieres que tu salsa quede más espesa, puedes añadir 1 cdta de maizena, de preferencia diluída en un poco de leche.
Ahora que ya tienes tu salsa, solo queda preparar un buen corte y acompañar con unas riquísimas patatas fritas.