Entrevista de Abraham Quintero
Entrevista de Salvador
Desde muy niño mostré interés por la cocina. Me gustaba mucho la sazón de mi padre, que preparaba platos contundentes de la cocina nacional. También mi tía Trina me enseñó mucho de cocina; desde reconocer los productos del mercado, pasando por su preparación, hasta lo más importante, su presentación y degustación. Se podría decir que entre los 8 y 9 años de edad ya estaba cerca del fogón y conocía algunos de sus secretos.
La idea del blog provino de una amiga que se empeñaba en que escribiese un libro de cocina. Se le ocurrió cuando puse en mi perfil de Facebook algunas recetas paso a paso. Luego otras amigas me instaron a que abriera un grupo culinario en el mismo portal. La idea era que todos aportarían sus recetas, pero al final terminé cocinando y comiéndolo todo.
Luego abrí el blog, en el cual no escribí ni una letra por más de un año, hasta que, en un curso de cocina, uno de los presentes me invitó a participar en el suyo. Esto me obligó en cierta medida a reactivar el mío.
Principalmente cocina regional venezolana, con algunos platos italianos y caribeños. También, ocasionalmente, incluyo algún plato o tema de interés gastronómico.
Los criterios de selección son simples: lo que cociné ese día y me gustó (generalmente platos ligeros y simples); alguna preparación o plato que no se consiga en restaurantes o haya variado con la moda o el cambio de gusto; alguna efemérides local o de un país donde haya vivido -entonces pongo un plato típico; o tal vez algo que compre en el mercado y le busque un uso.
La mayor parte de mis recetas provienen de una amplia colección de libros de cocina comprados en los últimos 35 años. Por razones profesionales tuve la suerte de trabajar en países, con cocinas diversas e ingredientes particulares. Por donde pasaba, trataba de degustar los platos nacionales, documentarme sobre ellos y, de ser posible, comprar un recetario.
Difícil decirlo. Tal vez sea la carne de cebra que comí en Namibia, que sabía muy parecido al caballo que conseguía en Roma, pero eso no se consigue con facilidad. Otro descubrimiento, pero no tan reciente es la sarrapia, que da un aroma a vainilla a las preparaciones, o una salsa picante que preparan los indígenas de la Orinoquia, al sur de Venezuela, llamado Catara, que se hace con una especie de hormiga roja y el veneno de la yuca amarga. Le queda muy bien a las carnes a la parrilla.
La pasta. Permite preparar un almuerzo balanceado en un solo plato; es fácil de preparar y no hace engordar tanto como se cree. Los venezolanos ocupan el segundo lugar en el mundo en consumo de pasta per cápita. A todos nos gusta y se la consume al menos una vez a la semana.
La cocina venezolana y caribeña.
Sí, que nadie me toque nada mientras cocino. A cambio, doy libertad a los comensales a servirse de las bebidas y tapas que les ofrezco, o a pasearse por la biblioteca y curiosear entre los libros.
Parece ser que hay mayor interés por la cocina que por la literatura. La mayor parte de los visitantes buscan alguna receta, o documentarse sobre un ingrediente. En su momento me impresionó la visita de algún chef reconocido que dejaba su comentario.
Que hagan la prueba. La cocina tiene algo de ciencia, algo de poesía y mucho de gusto. Nunca es tarde para comenzar. De repente no llegaremos a ser importantes como Escoffier o Vatel, pero siempre nos procurará satisfacciones.
Se han llenado la expectativas que eran principalmente compartir conocimientos en diversas áreas. Poco a poco he ido afinando la bitácora y ahora me gusta más que hace año y medio. Lo que no he logrado es establecer un orden, pero eso es harina de otro costal.
¡Entrevistamos a Abraham Quintero!
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Hola Abraham Quintero, cuéntanos...
¿Cuándo comenzaste a interesarte por la cocina? ¿De dónde surgió la idea de crear un blog?
Desde muy niño mostré interés por la cocina. Me gustaba mucho la sazón de mi padre, que preparaba platos contundentes de la cocina nacional. También mi tía Trina me enseñó mucho de cocina; desde reconocer los productos del mercado, pasando por su preparación, hasta lo más importante, su presentación y degustación. Se podría decir que entre los 8 y 9 años de edad ya estaba cerca del fogón y conocía algunos de sus secretos.
La idea del blog provino de una amiga que se empeñaba en que escribiese un libro de cocina. Se le ocurrió cuando puse en mi perfil de Facebook algunas recetas paso a paso. Luego otras amigas me instaron a que abriera un grupo culinario en el mismo portal. La idea era que todos aportarían sus recetas, pero al final terminé cocinando y comiéndolo todo.
Luego abrí el blog, en el cual no escribí ni una letra por más de un año, hasta que, en un curso de cocina, uno de los presentes me invitó a participar en el suyo. Esto me obligó en cierta medida a reactivar el mío.
¿Qué gastronomía podemos encontrar en tu blog? ¿Tienes algún criterio para publiar recetas?
Principalmente cocina regional venezolana, con algunos platos italianos y caribeños. También, ocasionalmente, incluyo algún plato o tema de interés gastronómico.
Los criterios de selección son simples: lo que cociné ese día y me gustó (generalmente platos ligeros y simples); alguna preparación o plato que no se consiga en restaurantes o haya variado con la moda o el cambio de gusto; alguna efemérides local o de un país donde haya vivido -entonces pongo un plato típico; o tal vez algo que compre en el mercado y le busque un uso.
Tus recetas suelen estar muy bien documentadas ¿de dónde recopilas toda esta información?
La mayor parte de mis recetas provienen de una amplia colección de libros de cocina comprados en los últimos 35 años. Por razones profesionales tuve la suerte de trabajar en países, con cocinas diversas e ingredientes particulares. Por donde pasaba, trataba de degustar los platos nacionales, documentarme sobre ellos y, de ser posible, comprar un recetario.
¿Cuál ha sido tu último gran descubrimiento gastronómico?
Difícil decirlo. Tal vez sea la carne de cebra que comí en Namibia, que sabía muy parecido al caballo que conseguía en Roma, pero eso no se consigue con facilidad. Otro descubrimiento, pero no tan reciente es la sarrapia, que da un aroma a vainilla a las preparaciones, o una salsa picante que preparan los indígenas de la Orinoquia, al sur de Venezuela, llamado Catara, que se hace con una especie de hormiga roja y el veneno de la yuca amarga. Le queda muy bien a las carnes a la parrilla.
¿Cuál es tu ingrediente/s fetiche?
La pasta. Permite preparar un almuerzo balanceado en un solo plato; es fácil de preparar y no hace engordar tanto como se cree. Los venezolanos ocupan el segundo lugar en el mundo en consumo de pasta per cápita. A todos nos gusta y se la consume al menos una vez a la semana.
¿Cuál es tu especialidad?
La cocina venezolana y caribeña.
¿Tienes algún ritual o manía en la cocina?
Sí, que nadie me toque nada mientras cocino. A cambio, doy libertad a los comensales a servirse de las bebidas y tapas que les ofrezco, o a pasearse por la biblioteca y curiosear entre los libros.
¿Qué experiencias destacarías en relación con tu blog?
Parece ser que hay mayor interés por la cocina que por la literatura. La mayor parte de los visitantes buscan alguna receta, o documentarse sobre un ingrediente. En su momento me impresionó la visita de algún chef reconocido que dejaba su comentario.
¿Qué le dirías a aquellos que no están interesados en la cocina?
Que hagan la prueba. La cocina tiene algo de ciencia, algo de poesía y mucho de gusto. Nunca es tarde para comenzar. De repente no llegaremos a ser importantes como Escoffier o Vatel, pero siempre nos procurará satisfacciones.
¿Cuáles eran las expectativas que tenías antes de comenzar el blog y qué ha cambiado desde entonces?
Se han llenado la expectativas que eran principalmente compartir conocimientos en diversas áreas. Poco a poco he ido afinando la bitácora y ahora me gusta más que hace año y medio. Lo que no he logrado es establecer un orden, pero eso es harina de otro costal.
Gracias Abraham Quintero por responder a nuestras preguntas. ¡Nos vemos pronto!
Publicado por Salvador - 24/09/2013
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Gracias por permitirnos conocerlo un poco mas. Y digo "mas" porque en lo que escribe ya deja translucir algo de si mismo
Comentario de olmarcent
Erratas solucionadas. Gracias por tus interesantes respuestas Abraham.
Comentario de Redactor Rebañando
Erratas:
En la pregunta 1: donde dice "La idea del blog provino de una amiga se empeña", debe leerse "La idea del blog provino de una amiga que se empeñaba en que escribiese..."
En la última pregunta, donde dice: "Poco a poco e ido afinando ", debe leerse "Poco a poco he ido afinando..."
Comentario de Abraham Quintero