Macarrones integrales con salmón fresco y pesto de albahaca.

De

Un plato, ligero, saludable y sabroso.

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  • Media
  • 25 minutos
  • 10 minutos
  • Medio

Ingredientes

  • 1 rodaja de salmón fresco (2 o 3cm de grosor)
  • 1 puñado de hojas de albahaca fresca
  • 1 cucharada de piñones
  • 1 diente de ajo
  • 2 cucharadas de grana-padano o parmesano rallado
  • 250gr. de macarrones integrales
  • aceite de oliva
  • sal
  • pimienta

Preparación

Paso 1

En primer lugar preparamos el pesto.
Lavamos bien las hojas de albahaca y las ponemos en el vaso de la batidora. Añadimos los piñones y el diente de ajo pelado y entero.
Añadimos 3 o 4 cucharadas de aceite de oliva, un poquito de sal y pimienta al gusto, y pasamos por la batidora, hasta que quede una emulsión cremosa. Si se ha quedado demasiado densa añadimos un poquito más de aceite de oliva. Tenemos que asegurarnos que el ajo ha quedado bien triturado.
Incorporamos ahora las dos cucharadas de queso rallado a nuestra mezcla de la batidora, y volvemos a triturar, pacientemente a velocidad media, hasta conseguir la consistencia deseada. ¡Ya tenemos listo nuestro pesto!

Paso 2

A continuación, en una olla ponemos agua a hervir con un poco de sal y una hoja de laurel.
Cuando el agua rompa a hervir añadimos los macarrones y los cocinamos al dente (o a nuestro gusto) siguiendo las instrucciones del paquete (entre 5 y 8 minutos). Cuando estén listos los escurrimos y reservamos.

Paso 3

Mientras que esperamos que la pasta esté cocida, vamos preparando el salmón poniéndola al fuego sobre una plancha o sartén.
Conforme el salmón se vaya dorando y cocinando vamos separando trozos grandes del hueso central, y los cocinamos a fuego medio hasta que estén bien hechos por dentro. Cuando estén listos los sacamos a un plato.

Paso 4

Ahora viene la parte más trabajosa de la receta.

Con cuidado vamos desmigando los trozos de salmón, asegurándonos de que no queda ninguna espina entre la carne, pues sería muy doloroso encontrarnos una mientras estamos comiendo. :)

Paso 5

Cuando hayamos terminado el trabajo de “búsqueda y captura” repartimos la carne del salmón entre los dos platos en los que previamente habremos puesto la pasta.
Ya solamente nos queda repartir el pesto sobre los platos y mezclar bien para que toda la pasta quede impregnada del pesto.

¡Que aproveche!

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Con un vinito blanco este plato tiene que estar increíble, pero si hay que ir a trabajar después pues también vale un vaso de agua! :)

Hay otra opción un poco más económica para hacer esta receta que consiste en utilizar almendras en vez de piñones para hacer el pesto. ¡Está también delicioso!

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