Semlor (bollos suecos de cuaresma)

De

Deliciosos bollitos con un relleno sorprendente y un toque de cardamomo.

  • 10
  • Dificil
  • 120 minutos
  • 15 minutos
  • 120 minutos
  • Medio

Ingredientes

  • Para el bollo:
  • 1 huevo
  • 50 gr. de mantequilla ablandada
  • 150 ml. de leche entera
  • 50 gr. de azúcar
  • 1 pizca de sal
  • 1 cucharadita de semillas de cardamomo
  • 400 gr. de harina de fuerza
  • 8-10 gr. de levadura fresca de panadero
  • 1 huevo batido para pincelar
  • Para el relleno:
  • pasta de almendra, mazapán o almendra molida (según lo que podáis encontrar; yo usé almendra molida)
  • nata montada o nata líquida para montar
  • azúcar glass (para decorar)

Preparación

Paso 1

Paso previo absolutamente opcional: infusionamos la leche con las semillas de cardamomo dejándola cocer durante 5 minutos para que se impregne de su aroma.
Dejamos templar y colamos.
Digo que este paso es opcional porque se pueden añadir las semillas directamente a la masa, pero en casa no nos gustó la vez que las usamos así en otro bollo. Dudaba si echarlas o no y, al final, opté por esta solución intermedia que me gustó porque el bollo tiene al terminarse un toque muy ligero a cardamomo que lo hace especial y diferente a otros panes dulces.

Paso 2

Teniendo la leche ya templada, amasamos junto con los demás ingredientes del bollito hasta obtener una bola lisa y brillante y dejamos levar tapado con un trapo limpio o con un film hasta que doble su volumen.
Volcamos la masa en una superficie ligeramente enharinada, amasamos un poco para desgasificar y dividimos la masa en 8 o diez porciones, dependiendo del tamaño que queramos darle a nuestros semlor.
(Advertencia: llenan mucho, yo aconsejo hacerlos de tamaño más bien reducido).
Boleamos y depositamos en una bandeja de horno forrada con papel parafinado. Pintamos con huevo batido y dejamos reposar de nuevo hasta que doblen su volumen.
Precalentamos el horno a 200° C, volvemos a pincelar los bollitos y metemos al horno.
Horneamos a 180° C, calor arriba y abajo, sin aire, durante 10-15 minutos, en función del tamaño de los bollitos, hasta que estén dorados.
Sacamos del horno y dejamos reposar sobre una rejilla hasta que se enfríen.
Mientras se enfrían, montamos la nata con dos cucharadas de azúcar y reservamos.
Abrimos los bollitos por la parte de arriba, cortándoles como un sombrerito y, con cuidado, vaciamos parte de la miga.
En un bol a parte mezclamos la miga que hemos sacado de los bollitos con un par de cucharadas de leche templada y otras dos o tres cucharadas de almendra molida. Tendremos que obtener una masa espesa, jugosita, pero sólida.
Rellenamos los bollos con la masa de almendras y, sobre esta, nata montada al gusto. Colocamos la tapa y espolvoreamos con azúcar glass.
¡¡Listos para degustar!!