A pesar de trabajar con las mejores firmas de moda del mundo y pertenecer a la misma agencia de modelos que Giselle Bündchen; Thylane lo tiene claro: ''¡no quiere que otras niñas que empiezan en ese mundo sufran como ella!''
La ''locura'' con su belleza fue tal que su madre decidió cerrarle todas y cada una de sus redes sociales a la par que ambas dijeron ''no'' a varias campañas publicitarias millonarias en las cuales su inocencia de niña quedaba por los suelos.
Ahora (y años después); todo está volviendo a la normalidad puesto que ella es más madura y sabe verdaderamente lo que quiere.